El humano es un ser que se mueve a través mayoritariamente de los impulsos, muchas veces no os damos cuenta pero actuamos en reacción a un estímulo inmediato en vez de pensar en lo que estamos haciendo, lo cual provocaría que nuestra actitud fuese probablemente bien distinta a lo que en ese momento estamos realizando....
Las reacciones mas frecuentes son las de ira o miedo, pero muchas veces una de las reacciones que provocan sacar lo peor de nosotros es LA ENVIDIA: Sí, la gente anhela lo que tiene el prójimo, da igual que sea un bien tangible, como un coche, una propiedad, una determinada manera de vestir mas acorde a las tendencias, o lo que es más doloroso, lo intangible, como pueden ser ciertos privilegios (sobre todo cuando uno siente que también se los ha ganado), ciertas actitudes ante la vida, ciertos hechos como es el encontrar a alguien que te acompañe y que tu no lo logras, y eso hace que sintamos envidia y recelo, incomprension y revanchismo ante aquel que lo posee porque lo tiene y tu no....y eso saca lo peor de nosotros....
Ciertamente las reacciones ante un acto de envidia son muy complejas, pero aquí en España, donde el deporte nacional número uno, incluso por encima del fútbol, es el criticar, o como lo llamamos aquí, poner a caer de un burro, nos dedicamos a intentar quitarle a la persona que posee lo que tu no tienes a través del marujeo y de la crítica malintencionada, aquella que sólo busca crear una corriente adversa hacia aquella persona que tiene lo que tu deseas....muchas veces funciona, pero como digo yo, aquí la verdad solo tiene un camino, y la mentira tiene las patas bien cortas, y ese camino suele ser contraproducente, porque a la larga el único efecto que consigue es que si, puedes obtener aquello que deseabas, pero como en la película "SHOWGIRLS" dice, y muy bien explicado, siempre habrá alguien mas joven y talentoso que tu dispuesto a tirarte por la escalera....
Otro handicap viene cuando la envidia viene acompañada de la SOBERBIA, cuando, a través de cierta posición de altura, privilegio o responsabilidad, intentas atacar a la persona a la que quieres arrebatarle sus prebendas, porque a las personas que figuran a tu alrededor les creas una desconfianza, un estado de duda acerca de la idoneidad de tu perdona o de tus aptitudes, y eso hace que a la larga la persona que realiza el ataque se quede sólo en su batalla contra un mal que sólo radica en sus miedos y en su desdichada imaginación
Afortunadamente, yo me puedo considerar dichoso, yo lo poco o mucho que tengo lo he conseguido con mi esfuerzo, con mi trabajo, o con mi carácter, o con mi manera de ser ante la vida y las personas, y me puedo sentir muy afortunado, no sólo de lo que tengo, sino de quien me acompaña para disfrutarlo